1. Historia del chip 025 - Los nuevos pendientes - Irma 007


    Fecha: 17/10/2017, Categorías: Dominación Lesbianas Autor: chopin, Fuente: CuentoRelatos

    ... situación para intimar contigo. Lena no dejó de mirarla a los ojos. Conocía el cuerpo de Irma a la perfección y aun así le costó mantener la mirada tan arriba. Por su parte, Irma notaba la atracción que ejercía en Lena. Y en parte, la estaba confundiendo por su propia excitación general. —Espera. Miss Iron me ha pedido... me ha ordenado que siga tus órdenes. Era reticente, pero creo que tiene razón. Yo... necesito un tiempo para adaptarme a la nueva situación. Y ya que has sido tan sincera... me gustaría que me ayudaras. Yo soy una sumisa. No sé ser otra cosa. Y necesito alguien. Necesito... ayuda—. le dijo Irma. Su sonrisa surgió espontáneamente. El hábito estaba arraigado. Lena le cogió la mano. —Está bien. No seamos crías. Pero olvidémonos de mis sentimientos. ¿Cumplirás mis mandatos sin titubeos? ¿Sin cuestionar lo que te diga? Miss Iron sabe más que nosotras. Irma asintió. Carraspeó. Sabía que se esperaba de ello. —Cumpliré tus órdenes sin cuestionarlas, con presteza… y trataré de no decepcionarte. Volvió a sonreír. —Bien— dijo Lena. —Lo primero, si quieres llorar me parece bien. Tienes permiso, si lo deseas. Cuánto antes pase tu pena, mejor. Pero eso no es algo controlable. Quiero que comas algo, aunque sea ligero. Supongo que no quieres cambiar tu atuendo, por ser lo último que eligió Galatea para ti, pero es preferible que recuerdes los buenos momentos con ella. Te traeré algo más decoroso. Lena se quedó hasta que llegó el desayuno. Le ordenó a Irma que comiese. ...
    ... Salió a buscar ropa. Cuando Lena llegó, Irma se incorporó. Casi sin mirarla, sacó ropa de una bolsa. Le dio unas bragas blancas y un sujetador a juego. Eran normales y de su talla, pero debido a su falta de costumbre, Irma los sintió como una penitencia. El resto era un conjunto atractivo de pantalón y un top coqueto. Era claramente de marca, le hubiera decepcionado que Lena comprase algo basto o barato, después de todo tenía fábricas de confección. El problema era que Irma se sintió sofocada. Sus piernas siempre desnudas necesitaban transpirar y respirar. Lo único que quedaba al descubierto eran los pies y los hombros junto a una pequeña parte de la espalda, ya que el top era lo suficientemente sexy para no llegar hasta arriba del todo. Los brazos sujetaban los extremos del top y le impedían un movimiento armónico. Sintió calor y agobio al momento. Su permanente sonrisa disimuló su incomodidad. —Sólo tengo unos tacones altos. No creo que peguen demasiado— dijo a modo de disculpa. Se los puso para mostrárselo. Pero a Lena no pareció importarle. —Te sientan bien. Todo te sienta bien. Esa es la verdad. Pensé en contratarte como modelo en la empresa, pero al observar que no dabas ningún paso pensé que no estabas demasiado a gusto con tu cuerpo. ¿Te gusta llevar tacones altos? — le preguntó Lena, divertida pensando en la respuesta. —A Galatea le gustaba que los llevase— resumió Irma con su sempiterna sonrisa. No conseguía quitársela de la boca a pesar de su contrición interior. ¿Qué ...
«12...4567»