Historia de M
Fecha: 30/12/2018,
Categorías:
Transexuales
Dominación
Autor: Ser Pïter, Fuente: CuentoRelatos
... caricias, mi miembro estaba completamente erecto, cosa que al salir de la bañera pudo constatar mi Bendita Dueña, dedicándome una dulce sonrisa. Me seco con la toalla y me dio por todo el cuerpo cremas y lociones. Me dio un albornoz que yo me puse. Salimos el baño y nos dirigimos al comedor allí me esperaba un buen desayuno, tostadas, café, zumo de naranja, mantequilla y mermelada, yo me quede allí desayunando y recuperando fuerzas mientras ella fue a su habitación. Al rato me llamo. - ¡Marc, mio caro!! – por supuesto yo fui. Al entrar en su habitación quede perplejo, mi Diosa, estaba más Divina que nunca, se había vestido con un babydoll rosa con falda de encaje, con lentejuelas a la altura de los pechos y cintura, con una abertura delantera con lazo y espalda descubierta y un tanga de hilo del mismo color. Se acercó hasta la puerta, me rodeo con sus brazos el cuello y unió su boca a la mía, nuestras lenguas se entrelazaron en un cálido y profundo beso, cuando nos separamos, nos faltaba el aliento, nos miramos a los ojos, y con una ligera presión en los hombros, mi Reina me hizo bajar hasta ponerme de rodillas, le baje el tanga y apareció ante mí su inhiesto miembro, me lo introduje en la boca sin bacilar, me estaba empezando a gustar su sabor, me lo saque de la boca y lo lamí desde el escroto hasta la punta, mi lengua se paseó por aquella caña dura y caliente una y otra vez, me metí sus testículos en la boca y juguetee con ellos, copiaba, todo lo que había visto hacer a las ...
... chicas en las pelis porno, con las que me pajeaba una y otra vez en la soledad de mi cuarto, disfrute e hice disfrutar a Nella de aquella mamada, lo sé, por lo entrecortado de su respiración y por la mirada de vicio que tenía. Fuimos a la cama y me insto a ponerme a cuatro patas, se puso detrás de mí y empezó a jugar con su lengua en mi esfínter, la introducía una y otra vez, procurándome gran placer, después me introdujo un dedo, al poco dos, recreando se en un mete y saca con ellos, que hacía que me pusiera a cien, tanto es así, que sin poder aguantar más, le exigí que me penetrara, cosa que ella hizo presta, me la clavo de golpe, y aunque me dolió un poco, hizo que casi me corriera en ese mismo instante, conseguí aguantarme. Nella no decía nada, pero yo sabía que estaba disfrutando la situación, ya que me tenía rendido, y pidiendo a gritos, que me hiciera suyo. Inició un cadencioso movimiento de caderas, que fue acelerándose poco a poco hasta llegar a un ritmo frenético, culminando con una abundante corrida, yo al sentir toda esa leche en mis entrañas no pude aguantar más y también me corrí. Nos derrumbamos en la cama, yo debajo y ella abrazada a mí y con su polla todavía dura en mi interior. Por fin, se salió y cambiamos de posición, quedando tendidos boca arriba uno junto al otro. Así llevábamos un rato, recuperándonos, cuando Nella me cogió el pene y comenzó a hacerme una paja, como no podía ser de otra manera, mi miembro, empezó a cobrar vida y a crecer, cuando estaba ...