Historia del chip (042): Terapia (Kim 017)
Fecha: 04/01/2019,
Categorías:
Grandes Relatos,
Dominación
Autor: chopin, Fuente: CuentoRelatos
... caso, te diré que las costumbres sociales y afectivas son muy diferentes a las nuestras. La sexualidad es completamente diferente. Y antes de que preguntes, su padre murió hace dos años y por eso decidimos que viniesen conmigo. Si conocieses Batavia, comprenderías que nunca hubiera permitido que no tuviesen la oportunidad de crecer allí, a pesar de estar lejos de su madre. No te preocupes por tu sexualidad ante ellos, es algo normal en Batavia y están acostumbrados. Han estado cohibidos por mí, saben de mi atracción por ti. Mariona se incorporó, volvió a dejar la sillita donde estaba anteriormente. Sacó la llave del bolsillo de su pantalón y abrió la caja para que Kim pudiera vestirse., que negó con la cabeza. —Me debes una cita. No pienso irme a casa hasta obtenerla. Quiero que ligues conmigo. Quiero sentirte excitada toda la noche. Quiero romanticismo, devoción y ver en ti que me quieres llevar a la cama. Si no lo haces, no volveré por mi voluntad. Sólo por la obligación que me has impuesto. Mariona respondió sin pausa. —No hay problema. Pero es muy tarde y mañana trabajas. En fin, supongo que podrás tomarte una pastilla contra el sueño. Pero tenemos toda la vida por delante. Kim negó con la cabeza y matizó. —Hoy. Algo me dice que nunca darás el paso. Se me exige claridad en mi sumisión. Y expresar mis deseos, sin expectativas de que puedan cumplirse. Puedes tenerme como amante con mi entrega incondicional o por obligación, pero hoy no quiero quedarme sola en la cama con ...
... las pinzas. Ni siquiera podría dormir. Quiero que expreses tu deseo hacia mí, con tu cuerpo, hablando. Supongo que tienes el chip colocado y no puedes tener orgasmos. Eso siempre es un límite. No creo que te resulte tan importante. En ese momento, -por primera vez-, Kim se planteó que Lin tenía orgasmos con ella. ¿Cómo era posible? Ni siquiera se había dado cuenta en todo ese tiempo tan concentrada que estaba en darle placer. Mariona no le dio tiempo a seguir pensando sobre el tema. —Es la primera vez que no te veo como terapeuta. No he tenido tiempo de expresarte mi afecto o mi amor. Me cuesta más a mío que a ti. Puedes vestirte y nos vamos. —Es una noche especial también para mí. Busca un atuendo sexy. Algo que te excite especialmente. Incluyendo unos zapatos de tacón alto que vayan a juego y que te haga disfrutar al vérmelos puestos. Maquillaje, pendientes. No importa lo que tardemos. —Pues tendrás que entrar en casa. Buscaremos algo— sugirió Mariona con cierto desespero a estas alturas. Sabía que se había equivocado a la hora de seducirla. Kim vislumbró su indecisión. Se sentó en el porche a pesar de la frialdad del mismo. Casi agradeció sentir ese frescor en las piernas, tan cansadas las tenía. No la tocó, pensó primero en la falta de la pinza entre sus muslos. Pensó en Roger, se lo diría mañana. Quiero que esté orgulloso de mí. Trató de animar a Mariona. —Quizás he exagerado un poco. Si no puedes hoy…— le dijo con suavidad. Le tocó negar con la cabeza a Mariona. —Tienes ...