Fabricando a la mujer perfecta
Fecha: 03/06/2019,
Categorías:
Fantasías Eróticas
Autor: Aldebaran, Fuente: CuentoRelatos
... Encontré un buen trabajo y ganaba mucho dinero. Las mujeres dejaron de tener importancia para mí. Pero como hombre que soy, tenía mis necesidades sexuales. Me masturbaba con frecuencia, pero nunca tuve novia y tampoco me fui de putas. Una noche sonó el teléfono. -Sí, ¿diga? -¿El Sr. Martinez? -Sí, soy yo. -Le llamo de Robotical Industries. Hemos estado siguiendo su trabajo y nos parece fascinante. Nos gustaría contratarle por una buena suma. -¿Una buena suma? -Queremos que trabaje para nosotros. Disponibilidad total. Y tendrá su propia casa. -¿De cuánto estamos hablando? -De ocho ceros. Un contrato por dos años y al tercer año tendrá nueve ceros. Me quedé sin habla. Es verdad que ganaba mucho dinero, pero ocho ceros era demasiado. -¿Podría venir mañana? ¿Sigue ahí? -Ah, sí, contesté con un hilo de voz. Mañana estaré ahí. Quedamos a las 9 de la mañana y me dio la dirección. Cuando colgué seguía sin voz. Al día siguiente fui a la dirección que me había dado. Ni siquiera me despedí en mi otro trabajo. Firmé el contrato. El hombre con el que había hablado, me indicó que cuando estuviera disponible, les avisara y me llevarían a mi nueva casa. En un par de horas había recogido todas mis cosas y devuelto la llave de mi apartamento a mi casera. Estaba en la calle despidiéndome de ella, cuando una limusina apareció por la esquina y aparcó junto a nosotros. Mi ex-casera se quedó con la boca abierta. El conductor se bajó y abriendo el maletero, me ayudó a guardar todas mis cosas. Yo ...
... subí a la limusina y una mujer de unos 30 años trajeada, que estaba sentada atrás, me entregó una carpeta de tapa naranja. -Soy Raquel, de Robotical Industries. Bienvenido a la familia. -Gracias. -Aquí tiene la descripción de su primer trabajo. Y la copia de su contrato y todas las indicaciones de su nuevo domicilio. Una casa domótica con todos los últimos adelantos. Le eché un vistazo por encima a todo. La mujer me sonreía. Me fijé en que llevaba un buen escote. Tenía un buen par de tetas. -El viaje será largo, me dijo. Espero poder ayudarle a relajarse. Pulsó un botón y subió el cristal que separaba al conductor de nosotros. Se abrió la chaqueta y me empujó la cabeza contra sus pechos. Yo no tenía ni idea de chuparle las tetas a una mujer, pero ella se dejó hacer y se las comí como pude. Más tarde, ella me bajó el pantalón y sacó mi polla de los calzoncillos y empezó a chupármela. Cuando estuve empalmado, sacó un preservativo del reposabrazos y me lo puso. Se quitó la falda y las bragas y se puso encima de mí y se la metió. Iba a ser mi primera vez con una mujer. Se soltó el pelo que llevaba recogido y así empezó a cabalgarme. Follamos bastante tiempo, bueno en realidad fue ella la que me folló a mí, parecía saber que nunca me hubiera acostado con una mujer. Para ser mi primera vez, duré bastante. Raquel se salió de mi cuando me corrí. Parecía que ella no se había enterado de nada, porque no gimió ni nada. No sé si corrió o que. Me quitó el condón y lo echó a una bolsa pequeña ...