Dominada y humillada 14 - Relatos Eróticos

Dominada y humillada 14

... tranquila, segura de sí misma y de que iba a arrepentirme si incumplía una orden, eso me aterraba. Tras ponerme el spray en las tetas bajo la mirada de unos diez estudiantes, quise acercar las tetas a la ventana, pero un tirón de pelo me lo impidió.

- Empieza por arriba.

Resignada, me subí al taburete y, mostrando todo mi cuerpo desnudo, empecé a limpiar la parte superior. Los estudiantes me empezaron a sacar fotos y videos, mientras yo iba bajando y, como mi ama no me dejó bajarme del taburete, mis desprotegidas intimidades quedaban a la vista de todo aquel que tuviera la suerte de pasar por esa calle a medida que me agachaba.

Cuando la ventana quedó totalmente limpia, sin dejar de agarrarme del pelo, Melani se dirigió a la habitación de mi hermana. Cuando llegamos, mi hermana estaba encima de Juan, cabalgándolo sin ningún pudor. Mi ama, sin que pareciera importarle la situación, llamó a la puerta abierta tal y como había tenido que hacer yo.

- ¿Quién es? - Contestó Juan ante la risa de mi hermana, pese a que nos estaban viendo.

- Somos tu novia y una perra desobediente.

- ¿Qué quieres?

- Esta perra se ha apartado para que no la pudieran ver.

- ¿Cómo? Ven aquí trozo de basura. - Contestó mi hermana indignada, pero sin dejar de botar encima de Juan en ningún momento.

Cuando me acerqué a ella, me dio una bofetada. Debo reconocer que dolió más por la humillación de la situación que por el daño de la misma. ¿Por qué ella podía darme una bofetada ...

... mientras se tiraba al novio de Melani mientras yo tenía que cumplir cualquier fantasía que se me ordenara? La rabia que me hacía sentir no se desvaneció cuando volvió a abrir la boca.

- Ahora ponte cara a la pared y azótate hasta que decidamos tu castigo, y más te vale que acabes con el culo rojo.

Colorada por una mezcla entre ardor, vergüenza y rabia, me dirigí a la pared y empecé a azotarme, procurando que el culo me quedara rojo. Mientras tanto, mis tres verdugos discutían sobre mi castigo entre los gemidos de mi hermana. Melani propuso que limpiara el resto de ventanas que quedaban en el piso de abajo desde fuera, para que no pudiera esconderme. Mi hermana sugirió que volviera a empezar y, finalmente, Juan dictaminó que, como había intentado evitar que me vieran desnuda, ahora debía demostrar que me arrepentía mostrándome desnuda y, tras decir esto, le dijo a Melani que me hiciera una foto desnuda y la colgara en mi twitter.

Mientras intentaba procesar lo que acababa de decir, Melani me agarró del cabello y me arrastró hasta el baño. Una vez allí, sacó mi móvil y me apuntó. Yo me puse de espaldas intentando taparme, pero Melani me indicó que, estando de espaldas, debía girar el tronco para que se me viera la cara y, al menos, una teta. Para evitar que me borraran la foto, me permitió taparme el pezón con dos dedos.

Tras subir la foto a mi twitter, sin darme ninguna oportunidad a evitarlo, Melani me enseñó la foto que ya había publicado. En esta, se me veía todo el ...