Las cuñadas
Fecha: 26/11/2024,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: charlines, Fuente: TodoRelatos
... fue bajando lentamente hasta situar su coño en mi boca. Marta disfrutó del acoplamiento, pues hasta que no tuve el coño de Mariela en mi boca, no reactivó su chupada. El coño de Mariela se deshacía en mi boca y con mi lengua. Mi lengua entró hasta el fondo arrastrando todos los jugos de esa hembra que clavó las rodillas en la tierra y se sujetó de mi pecho. Yo seguía follándola con mi lengua, aprovechando su bamboleo sobre mi boca. Marta incansable, ya había traspasado su garganta con mi polla y ella misma se follaba la boca en un irresistible frenesí. Alcancé el clítoris de Mariela y lo lamí con suavidad recogiendo a la vez todos sus jugos, jugos que se desbordaron cuando sorbí ese pequeño apéndice y lo deshice entre mis labios. Mariela se dejó caer sobre mi boca, mientras meneaba su cuerpo sobre ella. Su grito de placer sacó a Marta de su ensoñación y durante unos segundos admiró con envidia como su cuñada se corría y temblaba sobre mi boca.
Cuando se hubo recuperado, Mariela, se acercó a su cuñada, se tumbó en la hierba y le dijo.
Ahora me toca a mí.
Marta soltó mi polla y se quedó mirando como Mariela la tragaba entera. Esa boca tan caliente me levantó del suelo. Metió mi polla muy lento hasta la garganta y salió despacio llenándola de babas. Sujeté su cabeza y aguanté el placer durante unos segundos. Mariela empujó con sus manos para volver a tomar aire. Marta, hipnotizada, miraba la escena mientras acariciaba su coño.
Marta, ven, ponme el coño en la ...
... boca.
Marta se levantó y se acercó a mí sin dejar de mirar como mi polla era engullida por su cuñada. Lentamente se dejó caer sobre mi boca hasta tocar mis labios con su coño, coño que estaba hirviendo y jugoso. Al igual que hiciera con Mariela, metí mi lengua en él para saborear los jugos de Marta. Marta temblaba y se movía despacio aprovechando la follada de lengua. Atrapé su clítoris entre mis labios y le di lengua con rapidez, esto sorprendió a Marta que se vino en un segundo sobre mi boca. Pero yo no paré y sujetando con fuerza sus caderas seguí dándole lengua hasta que explotó en mi boca, llenándola con sus jugos. Marta se lanzó hacia mi polla, para salir de mi boca y ahí jadeó gustosa.
Joder, cabrón, me has desecho el chocho.
Acostada como estaba, acarició la cara de Mariela que alzando sus ojos la miró.
Mariela cariño, necesito que me fólle.
Mariela sacó mi polla de su boca y se quedó mirándome. Me levanté, puse a Marta en cuatro y mirando intensamente a Mariela a los ojos entre de una en Marta. Marta gritó gozosa al sentir mi polla dentro. Yo entré como cuchillo caliente en mantequilla y le di fuerte, con la fuerza suficiente para poder aguantar un segundo envite. Mariela me miraba y se relamía, se mordía el labio y se apretaba sus largos y duros pezones. Se me acercó y me besó con intensidad mientras azotaba el culo de su cuñada. Esta gemía mientras apretaba su cara contra la hierba y me ofrecía su sexo para que la destrozara. Tras unos minutos, Marta se ...