1. Deseando el trasero del niño de la iglesia, El campeón del juego.


    Fecha: 25/12/2024, Categorías: Dominación / BDSM, Fetichismo Gays Autor: MarcoDaniel, Fuente: SexoSinTabues30

    ... pero estaba bronceado, ojos negros, nariz un poco ancha, labios inferiores en «m» o marca de corazón. Y lo peor que mi autoestima estaba por los suelos… Un niño tan bonito nunca se fijaría en mí.
    
    Una hora después llegó Jordy y su mamá a la iglesia. Se sentaron a dos filas delante de mí.
    
    ¡dios! Es tan lindo, parecía un ángel caído del cielo. Vestía un blazer gris largo, suéter blanco; de cuello alto, zapatos negros brillantes y su pantalón también era gris. Los hermanos evitaban mirarlo para no caer en la misma tentación que el hermano Raúl.
    
    Pero yo no podía despegar mis ojos en ese cuerpito tan inquieto. Su cabello sedoso y su perfil tan encantador, me parecería estar en una escena de alguna película romántica.
    
    Jordy volteó a verme y me sonrió tiernamente. Con la cara de tonto correspondí a su sonrisa, con una mirada enamorada.
    
    Durante el sermón, rogaba porque se quitará el blazer. Quería ver aquellas nalguitas perfectas, la causante de estimulaciones sexuales masculinas…
    
    Como oyendo mis ruegos, Jordy se quitó el blazer pero sentado. Aún así, podía distinguir el comienzo de sus nalgas a través del pantalón. Felizmente el asiento de madera, solo tapaba la mitad de la espalda superior.
    
    El suéter blanco de cuello alto, le quedaba pequeño y estaba al ras de su pantalón de vestir, el cual no tenía cinturón. El inicio de esas nalgas dejaba claro que tenía un culo respingado. La entrada de la rajita, a través del pantalón se veía profunda, ya que aquellas ...
    ... nalgas sobresalían a sus extremos.
    
    Mi verga estaba creciendo y tuve que regresar la mirada hacía el pastor para que bajara mi erección.
    
    De pronto Jordy se inclinó, poniendo los codos sobre sus piernas y las manos sosteniendo sus mejillas, haciendo que el suéter se levante y dejando ver su trusa/slip y el inicio de su rajita. La verga se me paró en seguida, ya no podía ocultarla.
    
    Su ropa interior celeste con pequeños dibujos de estrellas y planetas, se veía tan limpia que parecía nueva.
    
    —como quisiera tocar la textura de esa tela, llevarla a mi cara y olerla. Y si la tiene puesta, mejor, le diría que se siente en mi cara y olería a través de ella ese culito, besaría esas nalgas lamiendo también su ropa interior -al pensarlo mi polla botó un poco de líquido preseminal.
    
    Su rajita/entrada de sus nalgas, estaba más blanca que el resto de su cuerpo. También se veía impecable, la piel se percibía suave, pura, y lo que me excitó, aún más, es que se veía un poco rosadita; seguro por el roce de la ropa o el calor.
    
    —¿Cómo se sentirá el tacto en aquella zona?
    
    Con esa piel tan suave, mis dedos se deslizarían fácilmente hasta su hoyito. Estarían muy a gustos debajo de ese calzoncito con dibujos, sentir en mi mano la calentura de sus nalguitas y mucho más de su ano. No aguantaría si estuvieramos solos. Lamería con desesperación su entrada hasta llegar al borde de su ropa interior, y luego, bajaría lentamente su slip hasta que esas nalgas queden en frente de mí; blanquitas, ...
«1234...11»