Amor y morbo con mi hermana.
Fecha: 01/03/2025,
Categorías:
Incesto
Autor: Phibonacci, Fuente: SexoSinTabues30
... y apretaba justo y preciso mi pene. Lo suelta un momento, sentí sus dudas, pero no pasaron ni 10 segundos y sus dedos comienzan a acariciar mi tronco, de arriba a abajo, sentía tanto placer, morbo y felicidad, que temía irme en cualquier momento, a mal traer mio, mi pene se baja y se demora varios minutos en volver y aunque vuelve, la segunda vez solo logra la dureza de roca si viajaba en el morbo sucio. No quería eso, quería recordar este momento desde otra emoción, aún cuando el morbo me invadía no tenía que ser tan hardcore para prenderme. (Aprendí con el tiempo que a medida que vas cruzando límites y puertas, no es para nada fácil volver a exitarse por completo por puertas que has pasado por mucho, por lo que si uno avanzaba en el morbo sucio, debía saber que no solo era rico e intenso, sino peligro en cuanto el sexo, la mayoría estaba en otras puertas más atrás, en definitiva, o encontrabas a alguien en el mismo nivel de profundidad del morbo, lo que es difícil, o te costaría exitarse por completo para fluir en el sexo y no solo en el morbo. Es decir, el morbo podía silenciar al sexo. En fin, un aprendizaje difícil, pero me ayudo a poner más límites).
Sus dedos llegaron a mi glande y comienza con círculos en el líquido preseminal, era tanto que pensé me había corrido sin darme cuenta o sin orgasmo.
Ella con la palma de la mano comienza a esparcir todo el jugo por toda la verga, la sentía mojada y fresca. Me la apreta fuerte, muy fuerte la verdad. Pensé que no sabía ...
... hacer una paja, pero luego me dije con la experiencia que tiene imposible.
Entonces la suelta, le pone presión justa y comienza lento muy lento a mover para abajo.
En extasis dirigí la mirada a ella, porque mi foco era ver su mano en mi pene. Al mirarla ella me mira fijo. Comienza a subir y bajar a un ritmo más constante. Que placer sentía. Mi sueño se hará realidad podremos follar hoy por fin. Pense. Entonces yo también haría lo mío. Con ambas manos voy bajo su tanga, y en un segundo le bajo todo a la línea de las nalgas. Tenía en primer plano su monte de venus, su bello púbico y notaba los labios de su vagina. Ufff! Era un sueño. Ella no dijo nada, eso significa que si quiere. Pensaba. Entonces una mano comienza a recorrer su estómago y la otra su brazo, una hacia abajo otra hacia arriba. La primera en llegar fue la de abajo, tocó sus pelos, que eran cortos, precisos y hermosos, bajo un poco mas y siento su vulva. Recordé la primera vez que la había tocado, pero ese era un secreto mío. Mis dedos empezaron a tocar más y más. Una chica con la que había salido me dijo que me enseñaría a tocar una vulva. Aprendí varias cosas de ella, la primera, no se debe ser brusco o con mucha fuerza, eso solo aplica cuando el morbo y la calentura han subido de nivel, no al principio. Pero lo más importante que aprendí que el clitoris no era solo un punto en la vagina, sino que recorría por debajo de labios, era una forma de letra A, así jamás lo olvide, por tanto era muy importante no ...