La profesora de autoescuela (5ª parte y final) - Relatos Eróticos

La profesora de autoescuela (5ª parte y final)

... lo esperamos la señora me dice:

Sácate la sudadera bonita

Lo hago. Luego saca de su bolso una especie de collar de perro. Es de piel con unas puntas plateadas en el exterior. Con cuidado me lo pone al cuello y lo cierra con una pequeña hebilla como de cinturón. Saca una correa de pasar al perro y engancha un extremo al collar que está en mi cuello y el otro se lo pone en la muñeca. Entramos en el ascensor, pulsa el cuarto.

Cuando entremos has de caminar detrás de mí, con la mirada baja.

Sí señora.- Me he convertido en una chica sin otra voluntad que hacer lo que me pide. Me cuesta reconocerme, pero me excita mucho el renunciar a mi voluntad. No tengo que pensar, solo dejarme llevar.

El ascensor se para, abre la puerta y salimos al rellano, la puerta de la derecha está ligeramente abierta. Entramos. Yo sigo dócilmente a la Señora. Avanza decidida por el pasillo. Parece que llegamos a una especie de comedor, no lo sé porque solo miro el suelo. Oigo unos pasos acercarse:

Que bien, por fin llegásteis.

Claro, como no ibamos a venir.- responde la Señora entre risas.

Así que esta es la chica.- Para mi sorpresa ahora es un voz de mujer. Son una pareja !! Por el tono de voz veo que no deben ser demasiado jóvenes. CIncuentones quizás?

Sí, esta es mi alumna. Es una maravilla. Estoy encantada.

Noto los pasos dando vueltas a mi alrededor. Están examinando la mercancía. Oigo algún susurro y sonrisas. Una mano traviesa me roza la espalda.

Rosa, cariño, nos ...

... has traído un regalo precioso. Porque no la vas a preparar y nos vemos en la sala de juegos.

Claro. Desde que la ví pensé en vosotros. Vamos niña. Sígueme. - Un leve tirón de la cadena y me pongo en marcha.

Entramos en una habitación donde hay una cama, dos sillas y un armario.¿Esta es la habitación de juegos? Parece un cuartito pasado de moda, con sus pesadas cortinas y la colcha de flores en la cama. La Señora desengancha la cadena, se pone frente a mí sonriendo.

Tu tranquila y déjate llevar.

Sus manos cogen mi camiseta y me la sacan por la cabeza. Mi instinto hace que suba las manos como para taparme las tetas. Soy idiota !! Detengo el movimiento y las vuelvo a bajar. Me rodea con sus brazos y con manos expertas me libera del sujetador, instantáneamente noto un poco de frio y los pezones se me ponen duros. Se agacha frente a mi, desabrocha las botas y me ayuda a sacarlas. Yo solo la acompaño en los movimientos. Luego me baja la falda y me quedo en bragas. Sus bragas con polla. Abre el armario y veo que dentro hay todo un vestidor de cosas de cuero negro. Busca un poco y saca una especie de sujetador. Es más bien un bralet de cuero, con los pechos rematados en un cono de aluminio y una cadenita que los une. Me ayuda a ponermelo, me aprieta bastante los pechos lo que provoca que suban hacia arriba y hasta me hagan un poco de canalillo. Sigue buscando y me pone una especie de muñequeras con anillas en las manos y en los tobillos. Vuelve a buscar en el armario y ...