La Feria Medieval - El Museo 2 - Relatos Eróticos

La Feria Medieval - El Museo 2

... follármela cuando quiera.

Al oír esos comentarios y ver como Marie está cada vez más excitada, sigo avanzando en mi plan, acciono otro botón, y una luz se enciende en la otra habitación mientras cuatro pequeños agujeros se abren en el cristal.

“Joder, estos de la Feria piensan en todos;” señala uno de los chicos al ver los agujeros en la pared, acercándose a ella junto a otro de sus amigos.

Al momento dos pollas asoman por los agujeros y veo como los ojos de Marie se abren de par en par, ella no reacciona, pero yo de inmediato me llevo una a la boca pasando a los pocos segundos a la otra, repitiendo la operación. La siguiente polla en aparecer por uno de los agujeros es la de Jonas, que ha dejado de follarse a Estela.

“¿A que esperas?” le digo a Marie. “Llevas dos años fantaseando con ser la esclava de tu hermanastro, él cree que es una esclava quien le va a chupar la polla.”

Marie se acerca a la polla y comienza a lamerla, asustada de llevársela a la boca, cuando finalmente lo hace mantiene su mano sobre ella para hacer tope.

“Una esclava de verdad no usa sus manos;” le digo a Marie volviendo a llevarle las manos a la espalda, como hice hace un rato, aunque esta vez si las sujeto con unos grilletes fijados al suelo. “Y Jonas no quiere una mamada, quiere follarse tu boca;” añado cerrando un collar sujeto a la pared a su cuello, provocando que no pueda apartar la cabeza cuando su hermanastro comienza a empujar con más fuerza.

Me alejo hacia la puerta ...

... viendo como Jonas se folla la boca de Marie sin que ésta pueda hacer nada para evitarlo. Antes de salir acciono un nuevo botón de forma que ambas habitaciones son visibles desde los dos lados, de forma que todos los chicos pueden ver que la boca que se está follando Jonas es la de su hermanastra Marie.

Cuando salgo de la habitación dejando a Marie esperando a que los empleados de la Feria la recojan y procesen para su subasta mientras todos los amigos de su hermanastro se follan su boca, me encuentro a Mike esperándome fuera, con una amplia sonrisa en los labios.

Mike no va vestido como el resto de empleados de la Feria, va vestido de campesino para no levantar sospechas cuando se acerca a las jóvenes, por eso cuando se acerca a mí y me agarra por la cintura dándome un beso en los labios mientras mueve sus manos por encima de mis pechos, no muestro ninguna reacción, simplemente le devuelvo el beso y me comporto como si fuésemos una pareja normal, excitada por todo el sexo a nuestro alrededor.

“Si no fuese porque no quiero descubrir tu tapadera, ahora mismo te inclinaba sobre una mesa y te follaba;” me dice Mike tirando de mi hacia una de las salidas traseras del edificio.

La puerta da acceso a uno de los sucios callejones por donde se mueven el personal de la feria. En cuanto estamos fuera me empuja contra la pared y levantándome la ropa me quita el cinturón de castidad después de comprobar que no hay nadie mirando.

“Esto es un anticipo de lo que te espera está ...