JUANCITO, MI NIETO – CAPÍTULO 4.
Fecha: 24/03/2025,
Categorías:
Gays
Hetero
Incesto
Autor: GUILLEOS1, Fuente: SexoSinTabues30
... dejara hacer diabluras,“si se porta mal me avisa”, -acotó en un tono tipo orden y no me gustó mucho-. Estaba pensando desde antes como tendría que proceder con ella y su actitud de mierda me decidió rápido, había que bajarle el copete.
Tras cartón apareció mi consuegra, me abrazó y besó en la mejilla diciéndole aDébora que yo era el mejor consuegro del mundo, luego la saludó a ella y se la llevó para el lado donde se reunían todas las demás. La talDébora estaba totalmente desarmada y caminó conGraciela, pero la vi girar la cabeza un par de veces para mirarme, ya vendría al pie y, aunque me pidiera por laMadre Teresa no la iba a perdonar.Juancito les contaba a sus amigos de los juegos que había recibido de regalo y de las excursiones que hacíamos hasta el arroyo, luego los junté a todos y nos fuimos a recorrer los corrales.Juancito iba a mi lado apoyándose en uno de mis muslos yMarquitos lo imitó apoyándose en el otro, por lo que aproveché a acariciarle la oreja y el cuello al gordito querendón, su respuesta fue apoyar su cara en mi costado y, como no tenía ganas de preliminares ni de hipocresías o vueltas, mientras todos, sentados en unas empalizadas, miraban a los terneritos chicos que estaban apartados de sus madres, me puse al costado deMarquitos y le hablé al oído…
Lo busqué con la vista aIsmael después de que me dijera quien era y lo vi rubio, callado y flaquito, el prototipo del nene sumiso, no sería nada raro que alguno lo embocara, pensé que era bueno ...
... saberlo, pero no mezclaría los tantos y no hablaría con él. Llegó la hora de almorzar y nos volvimos todos para ocupar nuestros lugares en la mesa, el mío sería el más importante porque me ocuparía de servirles la comida a todos,¡menos mal que no pudieron masticar los platos!, al aire del campo les había abierto el apetito a la “jauría” y la algarabía era generalizada. Luego de comer y con las recomendaciones del caso se fueron a la pileta con las madres o a caminar para ver a los animales, yo preferí sentarme debajo de un árbol, se estaba fresco y tranquilo allí. Hasta que noté que alguien se paraba a mi lado.
Busqué en mi celular, ubiqué rápido el archivo y le di el teléfono para que viera el video y las fotos, estaban individuales porque había hecho una separación con cada una de las mujeres, aunque reconozco que el deCynthia lo había borrado completamente de todos lados. Lo miró concienzudamente y un par de lágrimas aparecieron en sus mejillas…
Se fue y hasta me pareció que movía más su culito al caminar, no había resultado con caótico y seguí allí gozando de la tranquilidad de la siesta. Al rato apareció la mamá deMarquitos, la gordita simpática tenía puesta una tanga que tapaba en parte con un pareo semi transparente, pero las tetas eran imposibles de disimular, la miré bien dándome cuenta que, aparte de algunas partes rellenas, no tenía celulitis ni flojedades y ella lo notó, pero no se dio por aludida ni se molestó, su sonrisa no cambió y se notó que acusó el halago ...