Una Buena Ocasión 3 - Relatos Eróticos

Una Buena Ocasión 3

... disimular, abriendo la nevera y diciendo:

-Ya hago yo los bocatas, y los dos asintieron con Damián sonriéndole.

Berta hacia los bocatas, pero de lado, ya que Damián le frotaba la polla por su coñito y su culito, hasta que ella se acercó más, empinando el culo, y subía y bajaba mientras cocinaba sonriente, frotándosela en su culo y su coñito empapado.

Damián miraba el móvil, y desde donde estaba Lucia no podía adivinar nada de lo que pasaba tras la barra de la cocina, hasta que berta se metió el capullo sin querer, y soltó un gemido débil con una risa nerviosa. Lucia la miro, y por la cara de los dos, algo estaba pasando.

Damián la miro sonriente, y le empujo más la polla a Berta, que la recibió mordiéndose los labios, haciendo los bocatas con los pezones ya durísimos. Damián la paro, con casi toda dentro. Y la contuvo en cuanto ella se quiso follar, clavándole las uñas en un cachete del culo con fuerza. Berta paro, con la polla dentro, y su coñito palpitando al son de su cachete apresado.

-Berta ¿Por qué vas sin sujetador? ¿no iras así por la calle no?. - le preguntó Lucia sin dejar de mirar furiosa a Damián.

- ¡Jajaja! no tonta, solo en casa, me agobia todo el día con eso puesto. - le explicó, notando como Damián la ponía más empinada y la aflojaba, dándole un gustito muy rico.

-Pues con las hormonas de este, más vale que te lo pongas, no se te vaya a frotar. - le dijo en tono de coña, pero mirando seria a Damián, que le sonrío mirando sus pechos, y le ...

... dijo:

-No te preocupes, está a salvo. Además, tiene razón, no sé cómo aguantas tantas horas con el puesto. - y le volvió a señalar sus pechos.

Berta siguió con su pequeño movimiento, follándose ahora solo con el capullo, y noto la mano de Damián que le arañaba el culo por un cachete y pasaba al otro, ella resoplaba gozando. Sabia que esa mano la volvería a apresar si se le ocurría meterse más polla. Y cuando acabo los bocatas, se paró de mover y le dijo a Damián:

- ¿Cenas aquí, o en tu habitación?. - pero sonó como si le suplicara que se fuera a la habitación.

-Aquí con Lucia, que se va a llevar una colleja, pero no sabe cuándo, ni dónde. - le contestó amasando su culo ahora suavemente, y sacándole la polla, con ella asintiendo algo apenada y yendo al salón con la bandeja.

Damián dejo de mirar a Lucia, y abrió la nevera para coger un refresco, y se lo froto en la polla un rato para bajarla, hasta que quedo ya morcillona y se la coloco yendo también al salón, con Lucia en guardia.

-Cena va, tregua de cena. - le dijo frotando su pelo y sentándose entre las dos.

Pero cuando se sentó, su polla morcillona se notaba demasiado, y a Berta se le escapo una risa, pero miro a la tele, que estaba encendida, pero en silencio. Damián fue rápido y se acercó a por el mando, se la coloco de lado y puso el volumen. Pero Lucia la había visto, y sabía que la medio tonta de su hermanita también, y empezó a sospechar de los dos, sintiendo en su coñito, como le recordaba los ...