Infiel por mi culpa. Puta por obligación (42)
Fecha: 10/06/2025,
Categorías:
Grandes Relatos,
Autor: DestinyWarrior, Fuente: CuentoRelatos
... pensaba diferente, sentía distinto y quería jugar a lo que ante los ojos de los demás estaba mal visto, se perdió en mi inconsciente con los años y despacio la dejé morir. Simplemente la olvidé… ¡O eso es lo que yo creía!
—Años y años alejándome los unos y los otros del mal, pero… ¿Y si el mal estaba ya dentro de mí? Me cuidaban de los demás, todos… Incluido tú. Pero cariño mío… ¿Quién carajos me cuidaba de los oscuros deseos del demonio que habitaba en mí?
—Te traicioné, claro que sí, y aunque te suene esto a una excusa barata, te fui infiel a medias. ¿Por qué, te preguntarás? Pues porque siendo verdad qué ofrecí mi cuerpo, nunca entregué mi corazón. Ese siempre ha sido tuyo, a pesar de que no te lo parezca. Te comprendo. ¡En serio! Me costó a mí, varios días descifrar el enigma del porqué hice lo que hice, despedazando nuestro matrimonio, destrozando tu confianza en mí y clavando un puñal o varios, en tu corazón. Mandé a la mierda lo que ya tenía, lo que construimos con los años… ¡Nuestra unión!
—Así que comprendo que me pongas esa cara de asombro y me obsequies esa sonrisa despectiva por respuesta a lo que te he comentado. Lo tengo bien merecido Camilo, descuida.
—Pero en serio mi amor, no fue el sexo con otros lo atrayente, aunque para ti, como hombre y esposo, eso lo consideres tan fundamental. Para mí ese sexo solo fue una consecuencia física a los sentimientos que yo, embriagada por ese novedoso poder que sentí, al poder defenderme sola de los hombres ...
... malos, fui constituyendo para mí y para, esa otra mujer en mi interior. Fue el poder de decidir qué decir y hacer, el cómo, el cuándo y él con quién. El dulce sabor de la sensación de tener yo, poder sobre mi vida y con ella, usar para mi beneficio y con las armas que por mi cuerpo disponía, para incidir en la de los demás.
—Pero también amor, debes saber que siempre, siempre, yo fui consciente de que tú ya te habías ganado con creces mi corazón y era sentimentalmente, exclusiva de ti. Inaudito e incomprensible, pero es la pura verdad.
—Y antes de responderle algo, Rodrigo, debí plantearme si realmente podría olvidarlo todo, convivir y juntos, intentar superarlo. Pero… ¿Sabríamos cómo hacerlo? ¿Tendría la fortaleza suficiente para asumir sus razones y justificarle esos motivos? ¿Llegó a sentirse fuertemente atraída por ese hijo de puta, siete mujeres o por esa diva de telenovelas? ¿Continuaría pensando en ellos? O simple y llanamente… ¿Su mayor deseo de sentirse poderosa y verse deseada por todo el mundo, se le había colmado, y a pesar de cómo me lo ha dicho, la sentiría nuevamente plena conmigo y satisfecha a mi lado sexualmente, sin requerir de nuevas sensaciones para su vida?
—Y me visualicé en un futuro, viviendo a su lado nuevamente, desconfiando a diario. ¿Lo resistiría?, o sería mejor… ¿Vivir nuestras vidas amigablemente separadas? Sí, esa era la cuestión por definir, mi querido amigo. No debería existir más para ella, aunque insistiera en seguir imaginándome, a su ...