Negros de buen corazón y buena verga VII
Fecha: 09/07/2025,
Categorías:
Fantasías Eróticas
Gays
Incesto
Autor: Remaster64, Fuente: SexoSinTabues30
... pese a la edad y me quede esperando a que hablara.
Observé como bajo su mano hacía su entrepierna masturbando su hombría, se dio la vuelta con una mirada seria.
—Escucha Ryan, mi hijo Constantine acaba de llamarme para pedirme un favor, al parecer le ha gustado mi regalo, pero aun así desea a alguien más, a ti, desconozco la razón, sin embargo asumo que tiene que ver con ese pequeño que tanto te gustaba follar—comentó el mayor sin dejar de estirar el prepucio de su verga, fruncí el ceño por sus palabras.
«Jamás imagine que ese niño haría algo como esto» pensé curioso, noté a mi jefe acercarse acariciando mi cuerpo con una de sus manos.
—Todos ustedes son míos, cuando eran jóvenes los eduqué con la carne que sostengo en mi mano, incluso mi hijo recibió el mismo trato que ustedes, pero como sabes, soy muy complaciente con mi familia, así que deberás ir a su encuentro, no obstante, debo despedirte apropiadamente—murmuró el adulto mayor apretando el agarre en su polla, forzó su otra mano sobre mi hombro arrodilladome en el suelo, golpeó su carne viril en mi cara manchandola de presemen, ambos nos miramos con cariño disfrutando del gesto.
—Haré lo que órdenes, padre—susurré abriendo la boca, saqué la lengua recibiendo con amor aquel pedazo de carne que me había criado desde que era un bebe.
—No sabes cuanto te extrañaré, hijo mio, se fuerte, papá siempre estará aquí para ti—habló el mayor acariciando mi rostro, su polla se hinchó estirando los pliegues de mi ...
... boca, mis labios se amoldaron a la carne palpitante, saliva brotaba como agua lubricando la zona.
Succioné la verga del mayor recibiendo una maldición de su parte, envolví mi lengua alrededor de su piel mientras tragaba más de su monumental hombría, la carne se estiraba en mis labios mientras la jalaba hacía mi garganta, tragué saliva sintiendo su glande golpear mi campanilla, respiré por la nariz aspirando un leve olor a orina.
Tomándome con sus dos manos, empujó su pelvis hasta hacerme tragar toda su verga de golpe, mi garganta se estiró disfrutando del calor que impregnaba mi boca, miré con adoración el cuerpo tonificado de mi padre apretando mis labios en su polla, le escuché gemir de gusto.
—¡Oh Ryan! ¡Mi hijo! ¿Te gusta la verga de papá? ¿Extrañabas tenerla en tú boca? ¿Recuerdas cuándo eras un bebé y te la daba de mamar? — su voz ronca acompañó cada una de sus preguntas, asentí en afirmación a todas ellas disfrutando de como movía su pelvis lentamente, permitiendo que cada centímetro de su mástil de carne se marcará profundamente en mi piel.
—Siempre llorabas cuando te quitaba mi polla para chupar, sino te daba de mamar tres veces al día era difícil que durmieras en las noches, hijo mio, cuanto extraño eso—murmuró el mayor sacando su polla, la carne húmeda salió de mi boca hasta tener la punta del glande en mis labios, acarició el contorno con su verga palpitante antes de volver a follarme con ella.
—Pasó mucho tiempo antes de que dejaras de mamar mi polla, ...