1. Jamal de carne y hueso. Leonor


    Fecha: 26/07/2025, Categorías: Hetero Autor: Eric Salazar, Fuente: TodoRelatos

    ... cuarenta años, al vernos se acercó. Tenía la polla morcillona y cuando estaba a unos tres metros, se apoyó en la mesa donde minutos antes habíamos estado follando y empezó a masturbarse. Leonor me miró con cara de morbo y me dijo en voz baja.
    
    - Esto es el dogging. A este lo conozco de alguna otra vez. No folla mal. - Y volviéndose hacia nuestro nuevo espectador, le hizo un movimiento de cabeza invitándolo a acercarse.
    
    Sin pensarlo dos veces. El mirón se acercó hasta nosotros, mi amazona se mordió los labios y cerró los ojos mientras un nuevo orgasmo asolaba su vagina que se aferraba a mi verga queriendo exprimirla. Nuestro voayeur particular estaba de pie junto nosotros, a un metro escaso, sin dejar de masturbarse. Leonor alargó la mano invitando a que el recién llegado le cediera la polla para jugar con ella. A mí, esa escena me puso muy caliente y empecé a levantar mis caderas follándola sin parar. Ella asió esa nueva verga que tenía un buen tamaño y la comenzó a masturbar mientras yo seguía martilleando su coño con cada golpe de mis caderas. El desconocido se acercó y puso su polla al alcance de la boca de mi amazona. Que sin dudarlo, sacó su lengua y empezó a lamer ese trozo de carne, desde la base hasta la punta, mientras seguía disfrutando de cómo la dureza de mi masculinidad seguía dilatando su vagina. El invitado sonreía y se dejaba hacer mirando cómo me follaba a esa leona.
    
    Ya no aguantaba más y sujetándola por las caderas. La avisé:
    
    - Me voy a correr. ...
    ... Me va a estallar la polla. - Le dije a mi amante para que se preparara.
    
    - Sí. Vamos semental córrete dentro. Quiero notarlo. Dámelo todo.
    
    Nada más decir esto, acelere mis embestidas, mis manos pasaron de sus caderas a sus pechos, los empecé a amasar mientras ella, tras mi aviso, aceleró su cabalgada. Había soltado la polla del intruso y saltaba encima de mí buscando su premio.
    
    - Ahhhhh. Pero qué gorda se te está poniendo. Dios, me vas a partir por la mitad. Ahhhhhh.
    
    Justo después de ese último grito estalló en el orgasmo más grande que había tenido esa tarde. Por mi parte, al notar toda esa presión rodeando mi falo, me hizo venirme inmediatamente. Le solté las tetas y me senté abrazándola mientras los dos temblábamos a la vez por las sendas corridas que estábamos teniendo simultáneamente. Se quedó sentada encima. Entonces Leonor me miro a los ojos y me dijo:
    
    - El mejor polvo de mi vida. Joder, que bien me has follado.
    
    - Me alegro de que te haya gustado. Multiorgásmica.
    
    - Mmmmmm. Nunca te olvidaré, Jamal.
    
    Pues claro que no rubia. Yo a ti tampoco.
    
    Nos dimos un beso a modo de despedida, me puse de pie y recogiendo mi toalla en la mochila, me dispuse a irme. Mientras tanto, nuestro invitado, había retomado su sitio y con ella de rodillas como estaba, le volvió a meter su falo en la boca.
    
    Cuando salí de la parte posterior del faro. Leonor seguía ansiosa por seguir corriéndose. La última estampa que quedó en mi mente era la de esa mujer de rodillas, con ...