1. Parejas de Conveniencia


    Fecha: 13/10/2025, Categorías: Incesto Autor: fuego de Hefesto, Fuente: TodoRelatos

    ... ¿crees que tu polla entraría en mi culito? Estaba salida, no me lo podía creer, y la palabrería me excitaba más, notaba como los juegos de mi coño discurrían claramente ya por mis muslos.
    
    Mi joven cuñado estaba igualmente fuera de sí. Era obvio que había llevado el juego bastante lejos, y aquel semental estaba dispuesto a todo. Por ello me contestó…
    
    – ¡Tenlo por seguro! “Te la clavaria hasta los huevos preciosa”. “Te atravesaría ese culito completamente”.
    
    – ¡Uy Hans…! ¡Qué miedo me das! Pero… ja, ja, ja… no te hagas ilusiones. Esto es solo un juego…. Y menos con la pieza que debes de tener.
    
    Mi cara era de auténtica putita sin dejar de mostrarle mi coño.
    
    El entonces, no puede contenerse más y comienza a desabrocharse el pantalón, y me muestra el bulto de su slip. El pobre estaba a punto de reventar. ¡Menudo bulto mostraba!
    
    – Vaya, ¡sí que estas excitado! – Y totalmente fuera de control – Aunque, “sabes que no vamos hacer nada”. Pero… ¿Quieres enseñarle tu polla a tu cuñadita?
    
    Sin contestarme se desprendió del slip, y ante mi apareció un tremendo cipote que me dejó con la boca abierta. Joder con mi cuñado, “que pedazo de tranca tenía”.
    
    – Pero Hans… ¡esto que es!, es casi el doble de la de tu hermano. ¡Qué monstruosidad!
    
    No me lo podía creer, era grande, casi el doble de la de mi esposo y encima mucho más gruesa, con un glande precioso. Las venas destacaban claramente en ella y aparentaban mucho más potente. Estaba como un misil. El coño me comenzó a ...
    ... correar solo pensar que podía clavarme aquella preciosa polla. Sin poder contenerme me acerqué y por primera vez, la tomé en la mano, y pasé la misma a lo largo y ancho de aquella…
    
    – Joder nene. Vaya vástago…. ¿No pretenderás follarte a la mujer de tu hermano con semejante tranca? Eso nunca entraría en mi coñito, ¡es enorme! – Exclamé.
    
    – Seguro que la recibirás toda cuñadita. – Y, sin decirle nada alzo su mano y me tocó el coño por vez primera, pasando su dedo índice por la entrada del mismo, produciéndome un placer infinito – ¡Oh Hans!, no me hagas eso, que luego no respondo… ohhhhh.
    
    Me deje caer sobre él. Me abrecé a su cuerpo musculoso y me recibió, mientras nos besábamos con furia. Palpe su cipote sintiendo su enorme petulancia.
    
    – Joder Hans, me gustan tus caricias… uff que bien lo haces, oh siii sigue… uff y tu polla, cómo está la pobrecita. ¡Esta que revienta!
    
    El me echó sobre el sofá, y dirigió su cara hacia mi coño, y sin esperármelo acercó su boca al mismo y comenzó a lamerlo…
    
    – Oh sí, Hans, que me haces ohhh… no me digas que… me lo va a comer. ¡Oh sí… lámeme, ohh eres un experto comecoños! Anda lame el coñito de tu cuñada. Vamos cómetelo. Asíii siii… que gusto… oho sigue asi cabronazo ohooo…
    
    Mi joven cuñado demostró que era un experto, y recorría mi clítoris, estimulaba mi ano, la calentura, el morbo de lo prohibido me impedían contener mis gritos. Yo gritaba como una perra, acabe con ríos de flujo en su boca….
    
    – Oh… Hans no dejes de lamerme ...