Parejas de Conveniencia - Relatos Eróticos

Parejas de Conveniencia

... asalta una duda… ¿Y cuándo empezaste a follar con él, vino el cambio de opinión… de ser independiente a depender de ti para siempre…?

– No de inmediato… solo tenía entonces 16 años, pero cuando empezó el grado superior con 18 años, ya quiso vivir independiente allí donde estudiaba. Pero yo ya lo tenía bien enganchado al sexo…follábamos mucho, y él quien más de todos sus amigos. Yo tomo mis precauciones, por eso le dejo follar a pelo. Nunca usamos condones.

– Claro, follar a pelo engancha más… Perdona mi intromisión, no quisiera ser indiscreta en absoluto, pero durante la siesta lo habéis hecho… habéis estado follando ¿Verdad?

– Sí, no hay día que no echemos un casquete o dos. A esas edades son un torbellino y más salidos que un mono, así que tengo el coño escocido de tanto follar, querida.

– ¡Qué envidia me das! Desde mi cuarto os oí, y me extrañó siendo madre e hijo, pero se oía claro que follabais. Dudé con la otra habitación, pero cuando le dijiste “Antonio más duro”, ya no me cupo la duda, supe que erais. Me causó cierto estupor, no veas.

– ¡¿Niklas también nos oyó?!

– No, él estaba escuchando música con los cascos. Dime… ¿Cómo fue la primera vez?

– ¿Tienes acceso a internet?

– Aquí no, no tengo activado el roaming. Lo podemos ver en el hotel con el Wifi.

– Mi hijo tampoco me lo ha activado. Después si podemos vamos y te enseño una cosa.

Tras esta asombrosa conversación llegaron los chicos…

– Vámonos que hay la final de la Eurocopa de ...

... futbol y la queremos ver.

– Pues vámonos – dijimos nosotras.

Pagamos las consumiciones y volvimos al hotel ellos se quedaron viendo el partido en una habitación y nosotras nos fuimos a la otra a conectar el ordenador con Wifi, buscó la página en la que ella publicaba y me sacó su relato en la que contaba su experiencia primera con su hijo…

– Mira este es, mientras lo lees yo voy a por unos refrescos abajo. – Lo leí muy atenta.

Al cabo de unos 20 minutos…

– ¿Ya has acabado?

– Sí, no es muy largo pero intenso… no me puedo creer que sea todo verdad.

– Pues lo es… ¿Qué te ha parecido?

– Me he excitado igual que cuando escuché los jadeos de placer con tu hijo.

– Entonces hazlo… plantéaselo a tu hijo como algo natural que necesitas… lo va a entender. Eres una mujer activa y joven, bien parecida y se le ve encariñado contigo.

– Sí, me quiere mucho, como madre supongo… ¿Cómo sé yo que él también lo desea?

– Ponte ropa sexy que te vea sugestiva, camina con sensualidad cuando pases delante de él, y como compartís cama, no te pongas mucha ropa… o nada de ropa para dormir.

– Sugerente, sexy y desnuda… no sé si sabré hacerlo bien, con los años he perdido práctica de seducción, además con 55 años ya no estoy para muchos halagos…

– Estás muy buena, te lo digo yo… y un hombre nunca se resiste a una mujer entregada. Póntelo como prioridad el ligártelo y después llévatelo al huerto sin dudarlo.

– Ja, ja, ja… que mala eres Araceli.

– Además yo creo que ...