Clases Particulares 11 - Relatos Eróticos

Clases Particulares 11

... grito. Estoy a cien.

El sigue vestido. Me pone estar con el coño al aire, a su merced, mientras el sigue con toda su ropa. Veo la erección en su pantalón corto. Sigue trabajándome con su boca. Una de sus manos suelta mi muslo. Sus dedos estimulan mi clítoris. En combinación con su lengua penetrando mi ano me enciende aún más. Dios, ya voy. Un día tengo que cronomentrarle, cada vez lo consigue más rápido.

- Me corro, Dios…-. Grito, esperando que los calmantes mantengan ko a la abuela. No he sido para nada discreta.

David introduce un dedo en mi ano y pego un respingo. Saco su dedo.

- Ahora no. Eso antes – le corrijo, y no tengo dudas de que la lección ha sido aprendida.

Me incorporo con dificultad mientras él se baja el pantalón. No lleva calzoncillo, va en plan comando. Que descaro. Se pone encima mío y lleva su polla entre mis muslos. Noto su glande rozar mi coño húmedo. Me mira con ojitos suplicantes.

- Miriam, podemos…

Uff, que tentación. Me apetece. Tiene buena polla. Pero…

- Hoy, no. Tienes un examen importante mañana. Tienes que estudiar, y si nos ponemos no vamos a parar. Ya hemos perdido el tiempo bastante…

La decepción cruza su rostro. Insiste con su mano guiando su polla rozandome por toda la zona. Incluso la ha llevado hacia mi entrada trasera, apretando un poco sobre mi esfinter. Ahora fricciona mi clítoris y aunque me acabo de correr, y de qué manera, me provoca un latigazo de placer. Uff. No lo puedo dejar así.

Me incorporo y me ...

... quito el sujetador. Ha ido tan a saco que ni siquiera me lo había quitado. El sigue de rodillas encima de la cama. Cojo su polla y las llevo a mis pechos. La tiene mojada de mis flujos.

- Ohhh -. Gime cuando la dejo entre mis tetas y con mis manos empiezo una cubana lenta.

- ¿Esto ya te lo ha hecho Sheyla? – Pregunto burlona

- Nooo, ni siquiera se las he visto – gime, sin dejar de mirar mis maniobras.

-Pobrecito – susurro sin dejar de masturbarle – ¿y esto?

Recojo su polla, bajo la cabeza, saco la lengua y le pego un lametazo en el glande.

- Dios, ahhh – gime, de nuevo. Como he parado y le miro inquisitiva, responde – No, no…no hemos ido tan lejos, solo nos hemos metido mano bajo la ropa…

Contenta con la respuesta, mantengo su mirada y me introduzco la polla entera en mi boca. Tiene un grosor similar a la de Alex, pero es un poco más larga. Mi primera polla distinta a la de mi novio en tres años.

Empiezo una mamada lenta. Me ayudo de mi mano derecha. Mi lengua en su glande, mis labios apretando el tronco. Poco a poco subo el ritmo y me la introduzco cada vez más. David no para de gemir. Su mano llega a mi nuca y trata de marcar el ritmo, pero la quito con un manotazo. Quiero tener el control yo. No sabe mal.

Ahora la saco de mi boca y lamo su tronco en un movimiento descendente hasta llegara sus huevos. Tiene algo de pelo por aquí, bastante descuidado. Acostumbrada a la depilación de mi novio, no insisto mucho en la zona, me da asco tragarme pelos y ...