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Albast.Capítulo 27
Fecha: 30/12/2025, Categorías: Grandes Relatos, Autor: Alex Blame, Fuente: TodoRelatos
... veinticinco Lancasters a bombardear un cruce de carreteras en un pueblo perdido de los Alpes, atravesando el corazón de Alemania en plena luna llena. Ya habían perdido seis aparatos y otros dos habían tenido que retirarse con daños de consideración. Y ahora una nueva misión que no le daba buena espina. En cuanto enderezó, ajustó la velocidad a trescientos veinte kilómetros por hora y puso el piloto automático sin dejar de renegar. Simmons no paraba de mirar el reloj. Les iba a ir muy justo. Esperaba que esos idiotas de la RAF fuesen puntuales por una vez y no se adelantasen. El pequeño convoy de camiones bajó por la carretera y atravesó el valle y el pueblo a toda velocidad. Al salir del valle, la carretera era un poco más ancha y pudieron ir un más rápido. Simmons miró el reloj de nuevo. Aun no podía creer lo bien que había ido todo. La acción de distracción de Lotte, había sido muy efectiva y le había evitado muchas bajas. Dudaba que hubiesen salido muchas de aquellas ratas vivas. Los chicos habían hecho un buen trabajo y el castillo ahora era un montón de escombros. Dantry le había dado un informe preliminar y habían conseguido abundante documentación. Los cabezas cuadradas, con su eficiencia habitual, lo tenían todo clasificado. Pasaron de los archivos y se fueron directos a la sección de ingeniería. Llenaron todas las cajas que podían portar y dejaron cargas para destruir el resto. Estaba realmente satisfecho. El único problema eran los prisioneros judíos. No ...
... podía dejarlos allí y tampoco podía llevárselos. No sabía qué hacer. Por fortuna Douglas había tirado de contactos y había conseguido otro transporte, no sabía muy bien cómo. De nuevo subieron un puerto, esta vez un poco más corto y cuando coronaron, vieron al fondo del valle siguiente el cruce, justo antes de entrar en la ciudad de Kuften, iluminada por los reflectores y los rastros de los proyectiles trazadores. Los bombarderos habían llegado puntuales a su cita. Aprovechando la pendiente, aceleraron de nuevo. Dos minutos después llegaron al cruce. Los guardias que protegían el cruce, miraban el espectáculo de su ciudad en llamas y fueron presa fácil de Dantry y su Sten. Con una sonrisa, giraron a la izquierda, justo cuando las bombas empezaban a caer en las inmediaciones del cruce de caminos. El punto de encuentro estaba a apenas veinte minutos de allí. El camino era bastante más cómodo de lo que parecía y a pesar de que el hombre de la Gestapo estaba sufriendo, llegaron al pie del acantilado en una hora. La patrulla que vigilaba el acantilado les detuvo casi al instante y Wust se puso al mando. Necesitaba hombres y el único destacamento de importancia estaba en Iglsburg, quince minutos al este de Kuften. Subió al semioruga de la patrulla y llamó por radio para sacar a todos los hombres, capaces de manejar un arma, de la cama. En cuanto llegó al pueblo, dio órdenes para que se llevasen a Gerhard a la enfermería mientras ellos arrancaban los camiones que ya estaban ...