1. Historia del chip 017 - En la consulta - Irma 004


    Fecha: 18/06/2018, Categorías: Grandes Relatos, Lesbianas Autor: chopin, Fuente: CuentoRelatos

    ... algo muy bonito, que haya renunciado a sí misma y se ofrezca a alguien de manera tan completa. Galatea le había indicado que las condiciones finales serían impuestas por ella. Que debía aceptar lo que le fuera colocado con alegría y devoción. Irma imaginó que habría más sorpresas. —¿Puedo saber todas las nuevas implementaciones? — preguntó Irma. Su voz traslució ansiedad, —Claro. Sus lóbulos van a poder aguantar bastante peso. Si se alargan demasiado, recobrarán su forma original con rapidez. Los piercings se cerrarán en pocos días si el agujero no está relleno, las células detectarán el aire y, por sí mismas repararán el lóbulo. Será algo doloroso cada vez. Cada nuevo piercing que se le practique le resultará tan molesto como la primera vez. Es la manera de recompensar a su amante, de ofrecerle su amor. Irma escuchaba con atención. No olvidó sonreír. Aunque lo que quería era salir corriendo. —Los nuevos nervios de la zona han sido reforzados diez veces, así que sentirá con mayor intensidad las caricias y los mimos que reciba. Con sincronismo hacia las zonas sexuales: pezones, clítoris, pechos y nalgas. Y todas las zonas de su cuerpo que habitualmente la excitan. —Pero tengo un problema vaginal...— excusó Irma. —Oh, sí. Lamento lo de su enfermedad autoinmune. No se preocupe. Su vagina no se humedecerá. Por lo demás, podrá disfrutar plenamente y ofrecerse a su amante. Tal y como desea. Irma asintió, queriendo dar a entender que comprendía lo que le había estado diciendo. El ...
    ... mero gesto le llevó la conciencia a sus orejas. Sentía el soplo del aire al pasar entre los agujeros. La enfermera ayudó. —Debe tener cuidado con los movimientos, al menos hasta que se acostumbre. Será como el roce incómodo de la ropa ajustada. O como una pluma acariciando la punta de sus orejas. Depende. Los agujeros se cerrarán en tres días. Por favor, no se los toque ni con guantes. Ni deje que se los acaricien. Sólo es necesario en esta ocasión. Luego pueden practicar el verdadero piercing. Aquí tiene los instrumentos. Le dio una caja con instrucciones y la besó en las mejillas antes de acompañarla a la salida. El mero contacto en las mejillas unido al aire entre los agujeros de las orejas bastó para endurecer los pezones y el clítoris. Llegó a casa antes que Galatea, algo extraño desde que trabajaba. No tenía sentido ponerse en actitud de espera. Hasta final de la tarde no llegaría y le había dicho que irían a celebrarlo. ¡Tenía tantas ganas de tocarse! Cogió un pincel y con delicadeza pasó los pelitos entre el lóbulo izquierdo mientras se miraba al espejo. Estaba desnuda como era de rigor. No tardó en sentir como los impulsos nerviosos iban hasta el hombro, a la cabeza y como si hubiera una conexión invisible a los pechos y la vagina. ¿Cómo iba a aguantar algo así? Probó con el lóbulo derecho y la sensación fue parecida, ahora notó también como deseaba que le acariciasen también la otra oreja. Su amante nunca tendría manos suficientes... o dedos. ¿Ocurriría igual cuando ...