Café con leche... mucha leche ! (I)
Fecha: 11/09/2020,
Categorías:
Gays
Tus Relatos
Autor: Hernando, Fuente: RelatosEroticos-Gratis
... !... traga, traga... Qué rico mamas !... Como te gusta la verga !... Chupa, chupa, lo haces bien... me gusta !"
Sus palabras se acompasaban con mis movimientos de succión, que eran desesperados, realmente incontrolados.
- "Vamos !... Ahora hazme una buena mamada de huevos..."
Sus deseos eran órdones. Apenas me cabía uno en la boca. El sólo imaginar que estaban repletos de esa leche que tanto me gusta, provocaba espasmos en mis cojones, así que pensaba que me iba a correr de un momento a otro. Estaba disfrutando como nunca...
- "Venga !... Ahora te toca comerte mi culo... Ponte boca arriba... Me voy a sentar en tu cara... y te lo voy a restregar todo..."
Juan se separó sus glúteos y se sentó sobre mi cara... Estaba disfrutando como nunca. Tenía la nariz y la boca exactamente en su raja.
Siguió durante unos minutos refregando aquel culazo moreno que se hallaba húmedo de sudor y brillaba. Mi lengua lo chupaba entero y relamía con vicio su raja, sembrada de pequeños pelos rizados. Mi lengua se adentraba en su agujero. Hummmm... Al ser sus pelotas tan grandes se refregaban así mismo por mi cara y mi nariz, llegando un intenso olor. Qué sabor a macho !... De repente, Juan se dejó caer y empezó a succionar mi verga en un 69 de película ! Iba a reventar al sentir la intensa mamada que sus gruesos y carnosos labios me regalaban. Puesto que vió que estaba a punto de correrme, Juan se levantó.
- "Quieres que te culee, eh ?... Estas muy excitado, cabroncito !.. estas deseando ...
... que te abra el culo con mi taladro, verdad ? Y que te la meta profundo... verdad ? Esperas ser penetrado, puto vicioso !"
El morenazo me puse en posición de perrito. Sentí como me escupia y el calor de su saliva adentrándose en mi agujero hambriento. Metió sus dedos uno a uno... No podía más, le pedía polla.
- "Vamos ! Juan... a que esperas ? Metémela hasta los huevos de una vez !"
Casi instintivamente mi culo giraba, haciendo círculos, impaciente por recibir sus embestidas.
- "Fóllame, por favor !... Fóllame, Juan ! Dios mio, que caliente estoy ! Como te deseo..."
Raramente macho me puso tan caliente, hasta el punto de olvidar el daño que su enorme falo podía causarme.
- "No quiero hacerte daño, mi vida... Vamos a ir agrandando este agujerito tan estrecho que tienes... no seas impaciente !"
Juan lubricó mi ano con gel, entonces separó mis nalgas.
- "Ahora ya no te dolerá. Te he dilatado bien el agujerito... y estás bien lubricado..."
Sentí el golpeteo de su barra caliente en mis nalgas, y luego su capullo en mi ano abriendose paso. Sentía un corrientazo y como se iba adentrando poco a poco. Le rogué que me la metiera entera, y le supliqué que me cogiera sin compasión.
- "Juan... la quiero toda adentro... toda !... ahhhh... así ! eso !....ahhh..."
Sentí que había hecho caso a mis súplicas. Comenzó a cabalgarme, sin contenerse, como le había pedido. A mis oidos llegaban a la vez el sonido de sus jadeos y el ruido de los golpes de sus huevos en mis nalgas.
- ...