Pequeñas Aventuras: Princesa. (Parte 1)
Fecha: 22/05/2024,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: RayFenix, Fuente: TodoRelatos
... volvió carcajada.
-Tampoco tantas -. Respondió. - Y sí, siento que eres especial, eres mi princesa -.
Esas palabras resonaron en mi cabeza como un trueno.
-Ya te dije que tenía muchas ganas de conocerte en persona -. Continuó. - Y si luego no nos atraíamos físicamente al menos seguiríamos siendo amigos -.
-¿Y que te he parecido físicamente? -. Me atreví a preguntar.
-Preciosa -. Respondió. -¿Y yo a ti?
-Por ahora me gustas -. Dije de manera capciosa.
-¿Por ahora? -. Preguntó entrando completamente al trapo en mi trampa.
Solté una carcajada y me acerqué a él para poner mi mano en su pierna rozando levemente su paquete.
-Aún no lo he visto todo -. Respondí de manera pícara.
Juan se quedó callado unos segundos, tan solo observándome mientras yo comenzaba a acariciar su entrepierna.
-Ven -. Dijo levantándose de la mesa cogiéndome de la mano.
Nos fuimos de la mesa y me llevó hasta los servicios, nos metimos en un baño y me sentó sobre la tapa del retrete.
-Yo te he visto desnuda, creo que es justo por si la cosa va a más -. Dijo desabrochándose el pantalón y bajándose la ropa interior.
He de confesar que, sin ser algo enorme, tenía una buena polla, además iba rasurado, se notaba claramente que era un hombre que cuidaba mucho su aspecto, todo.
-Me encanta tu polla, papi -. Dije cogiéndosela con una mano, mientras con la otra le agarré del culo para pegarlo contra mí.
Me levanté la camiseta y empecé a restregar su dura polla contra ...
... mis tetas viendo como se iba poniendo húmeda poco a poco. La exprimí con fuerza para que soltara más líquido y agaché mi cabeza para lamer la punta, estaba ansiosa por probar su sabor.
-Para -. Dijo en el momento justo en el que me disponía a meterme su polla la boca. -La primera vez no va a ser en un baño mugriento -. Añadió apartando su cuerpo de mí e inclinándose para darme un beso mientras se abrochaba el pantalón.
Me cogió de la mano y abandonamos el local rápidamente, cogimos la moto y nos dirigimos hacía el hotel, juraría que el viaje de vuelta fue bastante más corto que el de ida. En el hotel ni tan siquiera esperamos a llegar a la habitación. Ya en el ascensor empezamos a besarnos y acariciarnos apasionadamente como si jamás hubiéramos besado a nadie nunca ninguno de los dos.
-Me pones muy cachondo princesa -. Me dijo mientras me despojaba de la camiseta.
-Me das mucho morbo, papi -. Dije yo haciendo lo propio con su camisa.
Salimos del ascensor ambos semidesnudos, sin importarnos el hecho de poder cruzarnos con alguien, entramos en la habitación sin dejar de besarnos, solo paramos cuando me tuvo de pie de espaldas a la cama.
-¿Estas segura de esto? -. Me preguntó con voz calmada.
-Sí ¿Y tú? -. Contesté.
Ambos teníamos nuestros motivos para tomarnos unos segundos de calma, para pensar por última vez lo que estaba apunto de suceder.
-Sí -. Respondió cogiéndome de los hombros y recostándome en la cama.
Al momento ya tenía sus manos posadas ...