La captura de Letticia
Fecha: 29/09/2024,
Categorías:
Dominación / BDSM,
Autor: Catalina, Fuente: TodoRelatos
... enanas, ojos verdes, pelo largo y negro y que parecía haber cumplido 18 años aquel mismo día.
—Bienvenido al tren "Slut’s Fate", señor Pastorino—dijo cortésmente devolviéndole sus papeles—. Me llamo Caroline, compruebo los billetes de los pasajeros. Casi nunca tenemos pasajeros de primera clase. Como usted tiene un billete de negocios, dispone de una suite privada y puede utilizar, por supuesto, a todas las esclavas del tren nocturno, pero también puede violar a todas las empleadas que quiera e incluso a las pasajeras libres de las clases segunda y tercera.
Carlo sonrió y se limitó a agarrar uno de los pequeños pezones de la chica y a retorcerlo tan fuerte como pudo, haciéndola gritar.
—Muchas gracias, señor—dijo con una falsa sonrisa.
—¿Dónde duermes, puta?—preguntó Carlo—Quizá decida follarte la boca o cortarte los pezones durante mi estancia.
—Por favor, señor... me alojo en el compartimento comunitario 50, pero si daña una propiedad de la empresa... se le impondrá una multa de 1000ZAR...—murmuró, casi suplicante.
—¿1000 rands? Pero eso son menos de 60 dólares.—contestó Carlo, casi riendo—Me sale más barato romperte una pierna a ti que comprar una esclava y romperle la suya.
Caroline se llevó las manos a la boca, horrorizada, pero no dijo nada. Bajó la mirada. No sabía si el señor Pastorino había hablado en serio, pero no quería disgustarle solo por si acaso.
Carlo apoyó con fuerza la mano en la cabeza de Caroline y la utilizó para impulsarse hacia ...
... arriba y subir al tren. Escuchó cómo Caroline le daba las gracias y recogió de la mano de la joven esclava su tarjeta de entrada a la suite, la habitación 59, situada en la parte delantera del tren. Cuando entró en ella le sorprendió lo grande que era para estar dentro de un vehículo tan esbelto y alargado como un tren. Su ostentosa decoración con predominio del azul y el marrón ébano de la madera contrastaba con el rojo carmín del suelo de terciopelo sobre el que había una cama doble blanca y, situada justo enfrente, doblada sobre sus rodillas, una esclava negra como el carbón y calva como una bombilla que levantó la cabeza al verle entrar.
—Mi amo Carlo, me llamo Jeanette, tengo 18 años, seré suya durante todo el viaje. Fui esclavizada hace un mes y mi virginidad y mi cuerpo están a su completa disposición. Puede darme un apellido o cambiarme el nombre si lo desea. Me han afeitado la cabeza esta mañana. Si al final de su viaje quiere comprarme puede hacerlo por el módico precio de 3.500ZAR. Si no, me pondré a disposición de la compañía para formar parte de la tripulación del Slut's Fate—debía de saberse ese discurso de memoria—. Durante su estancia podrá violar a cualquier mujer libre del segundo y tercer vagón, a cualquier femployee a bordo y, por supuesto, podrá utilizar a cualquier esclava a su antojo. Tiene un aperitivo en su escritorio y el minibar se repone cada vez que sale de la habitación. Todas las bebidas son gratuitas, aunque le recomendamos que haga uso del ...