Al Servicio del Sultán 3
Fecha: 17/03/2025,
Categorías:
Dominación / BDSM,
Autor: jessmartin, Fuente: TodoRelatos
... algo muy valioso;” añade abriendo una de las yurtas, descubriendo a dos jóvenes de extraordinaria belleza dentro.
“Os presento a Laila y Maira al-Mansur, hijas del Califa Almohade Abu Yusuf Yaacub al-Mansur, su caravana camino a Trípoli para desposarse con el Emir de Cirenaica se desvió por una tormenta de arena y acabaron aquí;” nos explica Moussa; “En el resto de los camellos van sus sirvientas y su dote.”
Observo a las dos jóvenes aterrorizadas por lo que pueda ocurrirlas, seguro que saben el trofeo que significan para cualquiera, aunque no creo que todavía sepan por quien han sido capturadas.
“Montad el campamento;” les ordena Moussa a sus soldados, “Vuestras tiendas colocarlas algo alejadas y disponer varios centinelas. Que los prisioneros arrastren los muertos hasta el oasis y los dejen junto al resto, servirán de comida para los leones y los buitres.”
Los soldados obedecen rápidamente, pero eso no hace que Moussa deje de dar órdenes, “En cuando los soldados monten la tienda principal, llevadlas allí;” les ordena a Zeiga y a Sarah señalando a las dos jóvenes prisioneras, “De momento son princesas, más tarde ya veremos.”
“Atended a los heridos;” continúa ordenando dirigiéndose a Yaritza y a Merary, “Y tu encárgate del brazo de Eric;” le dice a Jimena.
En segundos todo el mundo está en marcha, tres grandes tiendas son levantadas en el centro del oasis, una para la cena, y las otras dos para Moussa y para mí. Media docena de tiendas más pequeñas son ...
... levantadas a un lado, con los prisioneros y los camellos capturados en medio vigilados por varios hombres, aunque sabemos que ninguno de ellos van a escapar, los rugidos de los leones mientras devoran a sus compañeros caídos son suficiente razón para detenerlos.
Tan sólo cuatro de nuestros hombres han muerto, otra media docena han sufrido heridas graves, aunque el resto incluido Zeiga y Merary sufren pequeñas heridas que son atendidas sin problema. Yo tengo un importante corte en el brazo, aunque lo más grave es que el golpe me ha roto el brazo, no me causará problemas a largo plazo, pero me obligara a llevar el brazo en cabestrillo varias semanas y que al tratarse del brazo derecho tengan que ayudarme a vestirme, lavarme y comer.
Un par de horas después, mis tres esclavas con la ayuda de las sirvientas capturadas, han preparado la cena utilizando los alimentos encontrados en los camellos. Antes de entrar en la tienda para cenar, Moussa llama al jefe de su guardia.
“Escoge a una de las sirvientas como tu esclava, y llévate a otras cinco para que se diviertan los soldados, aunque no bajéis la guardia y mantener el fuego encendido;” le señala.
El jefe de la guardia hace una reverencia y se aleja sonriendo, llevándose a la media docena de sirvientas tras él, unas sirvientas que a pesar de lo que las espera parecen tranquilas, y solo puedo pensar que ya eran esclavas, y tal vez no estuviesen demasiado felices con sus amos.
Me sorprendo cuando Moussa llama a los seis ...