Una Buena Ocasión 3
Fecha: 01/05/2025,
Categorías:
Incesto
Autor: Trastornado, Fuente: TodoRelatos
... pobre gemía cada vez más agitada contra la almohada.
Lucia no pensó en que hacer cuando nos pillara, y me tenía miedo. Se acercó lentamente a mi puerta, la abrió lo justo, y nos vio bajo las sábanas. Sintió odio, pero también envidia de su hermanita, que parecía tonta, pero por lo que había oído, esperaba ansiosa a que le follara el culo. Y eso es lo que vio.
-Madre mía que diosa, vengo de estar con una canija, y a tu lado parecería una muñeca ¡jejeje!. - le dije sacando la sabana y admirándola con su culo en mi mano, y ella frotándose y mojando mi polla en su coñito.
- ¿Cómo se llama?. - me preguntó celosa, apretándome la polla con rabia.
- ¡Mmmh! ¿tienes celos putita? Se llama Sumía, pero tú eres mi diosa ¡Mmmh! ¡Mmmh! no los tengas, tonta ¡Mmmh!. - le dije empujando mi polla en su culo, con ella riendo y gimiendo.
- ¡Aaah! ¡Aaaaah! ¿seguro? ¡Mmmmh! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj! ¿soy yo? ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Mmmmh! más fuerte, dámela toda Tato ¡Ooooj! ¡Ooooj! ¡Si!, ¡sí!, toda dentro ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj!. -me pedía contenta de lo que había oído, y recibiendo polla sin compasión bien dispuesta, y hecha ya a ella a la perfección.
Lucia nos veía y tragaba saliva. Esto era porno en directo. Y con los ojos abiertos, flipaba de cómo le entraba tanta polla a su hermanita, amasándose un pecho sin darse cuenta. Se miró la mano y la parto, yéndose abajo para hacer que llegaba.
Pero, aunque cerro más fuerte de lo normal, y saludo, cosa que no ...
... solía hacer. Nos oía gemir desde mi habitación, con Berta haciéndome señas de que había llegado, pero le dije:
- ¡Mmh! ¡Mmh! Que le den, ¡Mmh! ¡Mmh! ¡Buff! ya lo sabe. Si se ha tirado un rato mirando ¡Mmh! Si, córrete que ya casi estoy ¡Mmh! ¡Mmh! ¡Mmh!. - y Berta soltó una risita entre gemido y gemido, viendo que se corría.
- ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Mmmmh! ¡Aaaaah! ¡Aaaaaah! Suéltamela ahora Tato ¡Aaaaah! ¡Mmmmh! que gustazo ¡Mmmmh! así, déjame a mi ¡Mmmmh! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡jajaja! ¡malo! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Aaj! ¡Mmmmh! me matas ¡Aaaaaah! -nos corrimos casi a la vez, con Lucia apretando los puños en el salón, oyéndolo todo.
Al rato, cuando nos oyó empezar otra vez, subió decidida, pero se volvió a parar al verme esperándola, y se dio la vuelta.
Le volvía a follar el culo, pero cara a cara, levantando sus piernas y chupándole los dedos de los pies. Ahora la polla resbalaba de lo lindo en su culito, ella apretaba para hacerme gozar y sentirla, mirándome como le comia los deditos de los pies y se los chupaba, y le dije a Lucia:
-Ven tonta, sigue mirando, igual aprendes algo nuevo. -y Berta esta vez rio a carcajadas, haciendo que se acercara desafiante, y nos mirara furiosa.
Pero a mí me la sudaba, seguí a lo mío, soltándole las piernas y bajando a devorarle las tetas de piedra, con ella gimiendo y riendo al notar mis mordiscos.
- ¡Plash! ¡Plash! ¡Estás loco, pervertido! ¡Plash! ¡Plash!. - me empezó a azotar el culo, haciéndome reír, y ...